Peeerfecto para una historia de Halloween, ¿no? 🫠
Era una noche de Halloween en Aromaville, e Iris y Jacinto, disfrazados y emocionados, estaban listos para su próxima aventura.
Tocaron la puerta de una casa que no habían visitado antes. La puerta se abrió y una familia con sonrisas enigmáticas los recibió...
"¡Truco o trato!", exclamaron Iris y Jacinto.
"Trato", respondió el padre de la familia, extendiendo una bandeja con varios tarros brillantes.
"Esta noche, no damos caramelos. En cambio, te invitamos a elegir una fragancia."
Intrigados, Iris y Jacinto miraron los tarros. Los más brillantes parecían especialmente atractivos.
Iris eligió uno dorado y Jacinto uno plateado.
Iris abrió su tarro dorado, esperando un aroma floral.
En su lugar, un olor fuerte y animal emanó. "Es civet," explicó el padre. "De las glándulas perineales de una civeta." 🙄
Jacinto, con curiosidad, abrió su tarro plateado.
Un aroma dulce y almizclado llenó el aire. "Eso es castóreo," dijo la madre.
"De las glándulas anales de los castores, a menudo utilizado por su similitud con la auténtica vainilla." 😵💫 🤯
Sorprendidos y un poco asqueados, los hermanos miraron los tarros menos llamativos que quedaban en la bandeja.
Decidieron abrir uno más, un tarro sencillo y opaco.
Al destaparlo, un aroma fresco y herbal se liberó. "Este es romero," sonrió la hija de la familia. "Su nombre científico es Rosmarinus officinalis, que significa 'rocío del mar', dándole un toque marino que pocos esperan. 🤩
Iris y Jacinto, al final, eligieron el frasco de romero.
Con su aroma fresco y herbal, les daba más alegría de vivir...
Se fueron aluciflipando entre arcada y arcada, riendo a la vez por no llorar y llevándose las manos a la cabeza, diciendo: "¡QUE FUEEERTE!"
Instintivamente, se llevaban el tarro de esencia de romero a la nariz para olvidar lo que los otros tarros desprendían.



